Cómo hablar de la menstruación en casa

Las niñas pueden sentirse inseguras o ansiosas por no saber lo qué esperar del comienzo del ciclo menstrual. Te presentamos algunos consejos para tratar el tema en casa.

El ciclo menstrual forma parte de la vida de muchas personas, pero no todos los padres y madres se sienten cómodos hablando de ello. No saber qué esperar durante su primer período puede hacer que las niñas se sientan ansiosas o asustadas y con muchas preguntas.

Necesitan saber que la menstruación es un parte de un proceso natural y que pueden confiar en las personas adultas cercanas para obtener información y, sobre todo, acompañamiento.



¿POR QUÉ HABLAR SOBRE LA MENSTRUACIÓN?

Hablar sobre los ciclos menstruales puede ayudar a las niñas a sentirse cómodas con su cuerpo y permitirles cuidar su salud. También las ayuda a sobrellevar los síntomas físicos o emocionales que puedan sentir y evitar cualquier sensación de vergüenza o incomodidad. Hablar sobre la menstruación es, también, una manera de acercarse en momentos de muchos cambios.

Para comenzar la conversación, se puede preguntar qué conocen sobre los ciclos menstruales y cómo se sienten al respecto. ¿Alguna de sus amigas ya tuvieron la menarca (primer periodo menstrual)? ¿Qué les contaron? Es una buena oportunidad para compartir experiencias y corregir información que puede ser inexacta o falsa, es decir desmitificar la menstruación.



CONSEJOS PARA HABLAR SOBRE LA MENSTRUACIÓN

➜ Apegarse a los hechos.
Utilizar lenguaje claro para describir los períodos, sin vueltas. Para eso es clave centrarse en la fisiología, lo que reforzará la idea de que se trata de un proceso biológico natural del cuerpo.

➜ Destacar que es algo natural.
Es importante recordar que la menstruación es una parte normal del crecimiento y un proceso natural que les sucede una vez que alcanza la pubertad, generalmente entre los 8 y los 16 años.

➜ Compartir experiencias.
Las niñas experimentan muchos cambios antes de tener su primer período. Los senos y el vello del cuerpo comienzan a crecer y las caderas se ensanchan. Las hormonas pueden afectar sus emociones y estado de ánimo. Que las mujeres de la familia o de confianza de las niñas compartan sus experiencias es una forma de acercarse y asegurarles que no hay motivo para asustarse o avergonzarse de ninguno de estos cambios, porque a todas les tocó vivirlo.

➜ Fomentar hábitos saludables.
Como en otros aspectos de la vida, la llegada de la menstruación es una nueva oportunidad para transmitir la importancia de realizar actividad física y tener una dieta saludable. El ejercicio regular y una buena alimentación son importantes para el bienestar físico y mental, especialmente en momentos de cambios. El ejercicio suave, como una caminata, puede ayudar a aliviar el dolor menstrual y prevenir los calambres, comunes en estas etapas.

➜ Introducir productos de higiene menstrual.
Las toallas sanitarias desechables, las toallas reutilizables, los tampones, y las copas o la ropa interior para el período son formas seguras y limpias de controlar la menstruación. La elección del producto es muy personal, así que dependerá de cada niña. Pueden necesitar más apoyo al principio para a seguir las instrucciones del uso seguro de los diferentes productos y más aún para probar algunos como tampones y copas menstruales que deben insertarse en la vagina. Es importante recordarles que todos los productos menstruales deben cambiarse regularmente, según de qué tipo se trate y la cantidad de flujo menstrual.



En lugar de dar demasiada información de una sola vez, se pueden buscar momentos, como:

• Cuando preguntan sobre la pubertad o cambios en su cuerpo.
• Si preguntan de dónde vienen los bebés.
• Si se compraron productos de higiene menstrual en la casa.
• Cuando las mujeres de la casa están menstruando.

Una forma de explicar la menstruación. A medida que crecemos, el cuerpo se prepara para tener un bebé. Cada mes, los ovarios comienzan a liberar hormonas que hacen que el revestimiento del útero se acumule porque está listo para recibir un óvulo fertilizado y poder contener a un bebé. Cuando no hay óvulo fertilizado, el revestimiento de rompe y sangramos por la vagina. Por eso, aproximadamente una vez por mes expulsamos ese revestimiento del útero.



ALGUNAS PREGUNTAS Y SUS RESPUESTAS

Si ya comenzaron las preguntas sobre la menstruar, se debe tratar de proporcionar respuestas simples que sean apropiadas para cada edad. Aquí hay algunas preguntas y respuestas comunes que se pueden proporcionar:

¿Cuándo comenzarán mis períodos?

Es diferente para cada persona, pero comenzará unos dos años después de que los senos comiencen a crecer o cuando se alcance la pubertad. Cuando comienza a crecer vello púbico o en las axilas, es una señal de que los períodos se acercan.

¿Cuánto tiempo va a durar?

Es posible que el primer período no dure mucho, ya que el cuerpo puede tardar algunos meses en entrar en un patrón. Una vez que eso suceda, los períodos suceden durarán de 2 a 8 días, cada 23 a 38 días.

¿Cómo se ve la menstruación? Los períodos pueden verse muy diferentes. El color del flujo menstrual a menudo cambia durante el período: de ser rosado, rojo y líquido al principio a más marrón, espeso y grumoso hacia el final.

¿Cuándo comenzar la conversación sobre la menstruación?

Si bien la mayoría tiene su primer período alrededor de los 12 años, algunas personas comienzan a menstruar a los ocho. Es mejor comenzar la conversación temprano y tener un diálogo continuo y abierto sobre los cambios físicos y mentales relacionados con la menstruación.

Comenzar la conversación sobre la menstruación antes de su primer período es la mejor manera de asegurarse de que estén preparadas, comprendan que es un proceso natural y no algo de lo que deban temer o avergonzarse.



¿HAY QUE HABLAR DE LA MENSTRUACIÓN CON LOS VARONES?

Muchos niños conocen poco o nada sobre la menstruación y no saben cómo apoyar a sus amigas y hermanas durante los períodos. Algunos incluso pueden hacer bromas por falta de conocimiento. Es importante hablar con los varones sobre la menstruación para corregir conceptos erróneos o mitos que generen un estigma sobre la menstruación. También es una manera de normalizar los ciclos menstruales: las conversaciones sobre el período con los niños pueden ayudarlos a comprender que es natural, alentarlos a buscar más información y fomentar la empatía.



HÁBITOS SALUDABLES DE HIGIENE

Llevar una buena higiene menstrual durante los períodos puede prevenir infecciones, reducir olores y ayudar a que las niñas se sientan cómodas. Algunos consejos:

• Lavarse normalmente durante los períodos para reducir el riesgo de infecciones.
• Mantener el área genital limpia lavándose la parte exterior de la vagina y las nalgas todos los días.
• Usar agua únicamente para enjuagar la vulva: la vagina es un órgano que se limpia a sí mismo.
• Siempre lavarse las manos con jabón después de ir al baño o antes de cambiar los productos menstruales.
• Colocar correctamente los productos menstruales desechables usados ​​en un basurero y nunca en los inodoros, ya que pueden bloquearlos.
• Usar ropa ligera y transpirable como ropa interior de algodón. Las telas apretadas pueden atrapar la humedad y el calor y permitir que los gérmenes proliferen.
• Beber muchos líquidos para mantenerse hidratadas y prevenir infecciones del tracto reproductivo.



¿CUÁNDO BUSCAR AYUDA?

Cuando los períodos están afectando la vida cotidiana de las niñas o están experimentando cambios inesperados, se puede necesitar ayuda extra. Se aconseja buscar apoyo médico profesional si:

• Los períodos son tan dolorosos que no pueden pararse o caminar.
• Sangra más de lo normal.
• Dejan de sangrar durante mucho tiempo.
• Sangran entre períodos.
• Si los períodos se retrasan. Algunas causas pueden ser por bajo peso, demasiado ejercicio, debido al estrés o a un desequilibrio hormonal.
• Si los períodos no han comenzado a los 16 años. Es posible que se realice una derivación al ginecólogo para que indague qué está causando el retraso de los períodos y analice los tratamientos que podrían ayudar.